El
periodista Emiliano Aguayo va por los cuarenta años y la música ha sido uno de
sus asuntos de trabajo. El año 2005 publicó el deslumbrante libro Maldito Sudaca: Conversaciones con Jorge González. Y ahora recientemente ha publicado Las
voces de los 80. Conversaciones con los protagonistas del fenómeno Pop-Rock, ambos
editados por Ril.
En este
libro entrevista a 21 protagonistas de esta historia, historia que Aguayo llama
Pop-rock, un movimiento que distingue de otras ondas musicales ochenteras, como
la corriente trash-metal (Massacre, Necrosis, Pentagram y Panzer) y el Canto Nuevo (Fulano, Congreso, Sol y Medianoche, Huara).
Emiliano
Aguayo es un entrevistador bravo, y ágil que se toma el tiempo para documentarse y saber lo que busca, precisando
el desarrollo musical chileno en un contexto más amplio, como las influencias musicales
inglesas o argentinas. Influjos musicales argentinos, por ejemplo, que algunos
protagonistas en el libro desmienten categóricamente.
Analíticamente,
el movimiento tuvo cuatro bandas pioneras: Banda metro (1980), Bandhada (1982),
Aterrizaje forzoso (1982) y Los Prisioneros (1983). Es la incubación donde se crea y se disputa un territorio
nuevo. John Bidwell siente que fueron incomprendidos por ser los adelantados: “Recuerdo que teníamos que trabajar mucho para
imponer nuestro estilo.” (John Bidwell).
“Para mí, lo
importante era juntar esas influencia inglesas con Los Angeles Negros o
Cecilia, me parecía que iba a dar un sonido diferente. No quería imaginarme ir
a tocar a Europa y ser una versión de un grupo de allá” (Jorge González).
“Siento que
la prensa nunca tuvo la capacidad de analizar un movimiento como el nuestro,
porque pienso que acá se hizo algo muy importante. De la nada hicimos un gran
movimiento.” (Germán Céspedes).
Con la
irrupción de Los Prisioneros con la Voz
de los 80 el año 1984, comienza el apogeo del movimiento. Son los años 84, 85
y 86.
“En ese
tiempo recorrimos el país, auspiciados por bebidas y cosas así. Tocábamos en
estadios, en buenos escenarios, con buena infraestructura.” (Pancho Puelma)
“Armamos UPA
y al poco andar, ya estamos en el Festival de Viña del Mar. Como Los
Prisioneros estaban censurados y nosotros estábamos en el mismo sello, segundos
en ventas y en una lista que corrió, nos tocó.” (Pablo Ugarte)
Hacia fines
de los 80 el movimiento perdió fuerza.
“Llegó el
momento en que casi le regalaban autos a los programadores para que pusieran
música que querían los sellos y que venían de afuera” (Claudio Millán)
“Sí, yo
canté Chile, la alegría ya viene,
pero jamás intenté hacer una carrera desde allí. La canté y me fui para la
casa.” (Claudio Guzmán)
“Para el
plebiscito del Sí y el No, un día me invitaron a a la Moneda para pedirme algo
para la campaña, porque no andaba bien.” (Pancho Puelma)
“Alguien de
la productora me contacta y me dice “Hay que hacer un jingle para el Sí, ¿Te
atreves?”. “Ya, sí”. Me pareció atractivo, era plata.” (Igor Rodríguez)
Emiliano
Aguayo tiene un buen punto al revelar y puntualizar claramente -en sus 30
páginas de la introducción-, que las voces del Pop-rock chileno de los años 80
eran parte o tenían un amplio link con las universidades chilenas, en especial
con la Universidad de Chile. 8 de los 21
de los entrevistados, (el 38 %), fueron estudiantes de música en la Universidad
de Chile, el llamado Conservatorio de la calle Compañía: Jorge González, Carlos
Fonseca, Juan Ricardo Weiler, Carlos Chung, Robert Rodríguez, Igor Rodríguez,
Pablo Ugarte, Luciano Rojas. Esas experiencias están documentadas en las
entrevistas.
Emiliano
Aguayo en su introducción y en las preguntas de las entrevistas va en camino en
validar una tesis sobre el mundo creativo, teoría que yo comparto, esto es, que
los movimientos culturales no nacen o no surgen en el vacío, no existen tablas
rasas. Los músicos se conocen desde tiempo, se vinculan, crean bandas, las
disuelven, se mezclan y conviven. Todo gran impulso creativo surge de un
intercambio y una cierta tradición, unas placas tectónicas creativas, y a veces
esa práctica, como el Pop-rock chileno, se articula en la universidad. La
universidad es la posibilidad de convivir con capas culturales y tradiciones específicas.
En ese
sentido, las pláticas de Emiliano Aguayo con los 21 músicos en sus 385 páginas son
trascendentes, está en el trasfondo de las discusiones sobre el rol y la calidad
de la universidad y esto debería preocuparles a los nuevos políticos en gestación.
El valor de la acumulación cultural en
la universidad no siempre ha sido destacado por los antiguos políticos y es
claro que debe ser retomado -en época de elecciones nacionales- en los nuevos
programas de reformas educativas. Las universidades son acopio, depósito de
cultura, conocimiento acumulado que permanece en estado latente, hasta que
llegue un estudiante curioso. Los políticos más jóvenes también deberían leer
este libro pues, desde este punto de vista, es además un aporte para el estudio
y desarrollo de las políticas culturales chilenas y como estimular al
desarrollo musical. Tres puntos pueden deducirse desde este libro como asuntos
a investigar:
1. La
importancia de la existencia y la viralidad de las redes, los círculos
artísticos, las colonias de artistas, las colmenas, las agrupaciones, como
centros de impulso artístico. Eso ocurriría con los músicos, los pintores, los
escritores.
2. Valorar la
educación artística universitaria, es decir, la calidad y el rol de la
universidad.
3. La
importancia del fomento comercial, financiero, y créditos a las pequeñas
empresas creativas, (productoras, editoriales, etc.) donde se incuban las
verdaderas ideas nuevas.
Las notas a
pie de página del libro incluyen 48 letras de las canciones más significativas
de las bandas musicales de los 80. Quizás esas letras de canciones debieron ir en un anexo al
final del libro, como un cancionero, un subproducto útil para ese gremio amplio
de melómanos que gusta cantar y recordar canciones.
El diseño
del libro es de Gabriel Tröstel y fotos de Gonzalo Donoso.
Músico entrevistado
|
Nacido
|
Banda
|
fundación
|
John Bidwell
|
1950
|
Banda Metro
|
1980
|
Germán Céspedes
|
1959
|
Aterrizaje Forzoso
|
1982
|
Carlos Chung
|
1961
|
Bandhada
|
1982
|
Jorge González
|
1964
|
Los Prisioneros
|
1983
|
Claudio Guzmán
|
1963
|
QEP
|
1984
|
Alvaro Scaramelli
|
1965
|
Cinema
|
1984
|
Carlos Cabezas
|
1955
|
Electrodomésticos
|
1984
|
Igor Rodríguez
|
1962
|
Aparato Raro
|
1985
|
Andrés Vargas
|
1968
|
Engrupo
|
1985
|
Pancho Puelma
|
1959
|
Los Socios
|
1985
|
Pablo Ugarte
|
1962
|
UPA!
|
1985
|
Alejandra Cappeletti
|
1961
|
Valija Diplomática
|
1985
|
Jorge Yogui Alvarado
|
1959
|
Emociones Clandestinas
|
1985
|
Titín Moraga
|
1963
|
Banda Pequeño Vicio
|
1986
|
Francisco Chachi
|
1967
|
Nadie
|
1986
|
Claudio Millán
|
1961
|
Viena
|
1986
|
Jaime Ayala
|
1986
|
Síndrome
|
1986
|
Juan Ricardo Weiler
|
1959
|
Pie Plano
|
1987
|
Robert Rodríguez
|
1965
|
Banda 69
|
1988
|
Miguel Barriga
|
1963
|
Sexualdemocracia
|
1988
|
Luciano Rojas
|
1965
|
La Ley
|
1988
|
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