1. El mayor valor de un escritor es el encanto, (la gracia, como en el amor).
2. No supedites tu cuento a la
política. Nabokov, el escritor mal genio, lo sostiene enfáticamente.
3. La literatura es invención e
imaginación. Las mejores obras son a menudo cuentos de hadas.
4. El lindo cuento de hadas que
uno imagina normalmente ya está escrito, y es un clásico con raíces en una Placa
Literaria. (Borges: “a veces escribí algo que ya había leído”)
5. La trama y el conflicto no
tiene mucha importancia. Lo ha dicho James Joyce. "La trama no es importante. El objetivo de toda obra de arte es la transmisión de la emoción".
6. Lo importante son los fragmentos.
El lector se detiene en una anécdota rara o sórdida o siniestra. Lo ha dicho Chuck Palahniuk. El fragmento es, a menudo, el significante freudiano: un chiste, un lapsus, un acto fallido, un sueño.
7. No rellenes. No despilfarres.
Ya hay demasiados libros buenos. Todos los días aparece un nuevo genio
literario. Sé leve o ligero (Italo Calvino).
8. Crea personajes empáticos.
Alguien mordido por la desesperación. Un personaje es una pequeña unidad privada
que vibra, que tiembla.
9. Evita lo fastidioso. Soslaya
a los que creen que para que lleguen unas gotas de agua, hay que mover montañas
y crear acueductos. No te
metas en esa jaula, que también la llaman tedio.
10. No pienses en finales
felices. Todos vamos a morir.
11. Si quieres hacer un
bizcocho anda a la cocina. Escribe. (Úrsula K Le Guin, la reina de la
fantasía). La habilidad para escribir son años de experiencia (Norman Mailer).
12. Nunca, pero nunca discutas
con un editor. Dice la canción: "nunca te cases con un ferrocarrilero, él te ama
a veces, pero su corazón va en su tren". (Never Marry a Railroad Man. Shocking Blue. )
OMAR PÉREZ SANTIAGO, AUTOR DE
“EL PEZÓN DE SEI SHONAGON” Y “MEMORIAS ERÓTICAS DE UN CHILENO EN SUECIA”.